viernes, 24 de febrero de 2012

Un año más


Hoy no vas a tener tu regalo de cumpleaños, pero quiero que tengas unas líneas de esas que no se borran con el tiempo.

Porque hoy intenté recordar el momento o los momentos que hicieron posible caminar en la misma dirección durante tantos años. Después de mucho pensar y de revisar cajas de recuerdos puedo decir que fueron las clases de Literatura las que lo hicieron posible: pupitres de madera y la Generación del 27.

Y también cartas, escritas en el 97 de mi puño y letra... nada de ordenadores. En esos tiempos en los que se buscaba un sobre y un sello y dejabas que se deslizase en el buzón con la esperanza de que llegase pronto.

En los años más perdidos me diste luz, y en los mejores sigues a mi lado. En mi casa no eres un amigo, eres familia. Testigo de mi boda  y de mis pasos. Porque eres y serás mi hermano, porque cambiamos el Camp Nou por los trileros y no te importó. Por los viajes en Crenspa, por los cafés de tardes enteras cuando éramos estudiantes y por los breves de ahora. Nuestra amistad no depende del tiempo, somos la suma de instantes que nacieron entre Valle Inclán y Lorca y seguirán sumando para demostrar que la amista más sincera sí existe y el ejemplo eres tú.
Feliz cumpleaños Pito, un año más.

25 de febrero de 2012

5 comentarios:

  1. Recuerdo esas clases de literatura. Recuerdo los pupitres de madera, formando un círculo. El mismo que ahora utilizo para mis propias clases. Recuerdo a mis compañeros. Obviamente, me acuerdo mucho de ti y de algunos más y "de las risas que nos hacíamos antes todos juntos". Pero "hoy no queda casi nadie de los de antes" y aquella aula estará en estos momentos detartalada, vacía y sólo con el eco lejano de nuestras voces.

    Cierto que no era la cabaña del Turmo, pero era nuestra clase; Jorge Sanz nuestro profesor, que no el actor que hiciera de Conan infante. Y, en efecto, leíamos a Lorca. Y me acuerdo de muchas personas: de culés incombustibles, de goles dedicados en persona en campos de fútbol, de poemas malsanos escritos a escondidas. Las vueltas que da la vida, ¿eh?

    Besos,
    A.

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    1. Me has dejado sin palabras... ¿Hemos sido compañeros de clase? ¿Quién eres? Menuda sorpresa! La verdad es que ando un poco despistada! Besos y espero tu respuesta!!!

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    2. Ha pasado más de un mes y no he vuelto a saber de ti... ¿Estás por ahí?

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    3. Bueno... hace mucho que no escribes...

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  2. Pronto habrá alguna novedad... Gracias quien quiera que seas por estar ahí.

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